La fantasía, la realidad.
Un verdadero abismo.
Dos caminos diferentes que te tiran de un lado y para el otro.
Me encantaría crear un puente que una fantasía y realidad, porque deseo llegar algún día a un punto intermedio.
Creer que a veces es mejor no distinguir lo real e irreal.
Mis mundos están llenos de seguridades e inseguridades.
De cosas que quisiera tener cerca y que ahora no voy a poder.
Por mi mundo irreal vuelan miles de cosas, pensamientos, ilusiones, visiones, sueños, tristezas, alegrías en mi corazón.
En el mundo en el que vivo, me rodean mis pensamientos, decisiones difíciles de tomar, mis metas a seguir, y un camino que avanzar.
A veces siento que no vivo en ninguno de los dos, que no siento, o tal vez, vivo y siento demasiado. Querer sentir esas ganas de vivir con límites capaces de cumplir. Vivir lo que siento constantemente.
Busco escapar de la realidad, soy tan flexible, que a veces no me puedo adaptar. Por lo tanto, la fantasía es un modo frecuente de enfrentarme a ella. Mis cambios bruscos para ver las visiones de mi mundo, del blanco al negro, del amor al odio (o viceversa, no importa el orden, pero nunca en una posición neutral). Por eso, la transición es complicada. ¡Cómo eliminar de mi vida la capacidad para discernir lo que es real de lo que es irreal! Sin embargo, siempre termino por darme cuenta de que divago y que permisiblemente me gusta engañarme atentando en contra de mis propios pensamientos. Y desde esa vez, llego a sentirme desorientada, sin encontrar un rumbo exacto, ni a donde ir, pero es por instantes, porque no estoy preparada para el cambio, por no querer ver la realidad, sentir la sensación de irrealidad permanente.
Dentro de mis más extraños momentos, a veces pienso que me adelanto a las cosas. Que no les doy suficiente tiempo para que se desarrollen. Pero, hay veces que se complican naturalmente, que no intervengo para complicarlas. Repitiendo situaciones ya vividas sabiendo que atentan contra mi deseo. Por alguna razón, no puedo evitarlo y sigo adelante dispuesta a minar el camino con obstáculos, no sé porque lo hago, será porque tengo miedo a cumplir algún que otro deseo. Pero no tengo miedo, hago lo que puedo, puedo un poco más. No tengo (hay) acuerdos para toda la vida.
A veces me gusta pensar sin usar la cabeza, pero es difícil. Las ganas de observar sin molestar a nadie, de escuchar sin interrumpir.
Hay personas que quiero recordar y personas que no quisiera que estén en mi mente por el solo hecho de querer reír antes de llorar. Personas que busco, que no encontraré más. Personas que esperar, que cambien no por mí, sino por ellos mismos.
Creatividad, inspiración.
Sueños, ilusiones, fantasías, locuras, deseos, búsquedas, recuerdos, dolores, sufrimientos, tristezas, penas, lágrimas, esperanzas, alegrías, risas, felicidad, sonidos, ruidos, voces, gritos, canciones, amores, desamores, promesas, obsesiones, celos, confusiones, desconfianza, distancia, fisuras, besos, abrazos, consuelo, ausencia, lejanía, inocencia, descubrimiento, vacíos, todo, nada, secretos, decisiones, cambios, promesas, confianza, seguridad.
Exclamaciones, interrogaciones, objetivos. Efectos, causas, consecuencias, y un sin fin de cosas que son las que hacen que mis mundos se revolucionen.
Un verdadero abismo.
Dos caminos diferentes que te tiran de un lado y para el otro.
Me encantaría crear un puente que una fantasía y realidad, porque deseo llegar algún día a un punto intermedio.
Creer que a veces es mejor no distinguir lo real e irreal.
Mis mundos están llenos de seguridades e inseguridades.
De cosas que quisiera tener cerca y que ahora no voy a poder.
Por mi mundo irreal vuelan miles de cosas, pensamientos, ilusiones, visiones, sueños, tristezas, alegrías en mi corazón.
En el mundo en el que vivo, me rodean mis pensamientos, decisiones difíciles de tomar, mis metas a seguir, y un camino que avanzar.
A veces siento que no vivo en ninguno de los dos, que no siento, o tal vez, vivo y siento demasiado. Querer sentir esas ganas de vivir con límites capaces de cumplir. Vivir lo que siento constantemente.
Busco escapar de la realidad, soy tan flexible, que a veces no me puedo adaptar. Por lo tanto, la fantasía es un modo frecuente de enfrentarme a ella. Mis cambios bruscos para ver las visiones de mi mundo, del blanco al negro, del amor al odio (o viceversa, no importa el orden, pero nunca en una posición neutral). Por eso, la transición es complicada. ¡Cómo eliminar de mi vida la capacidad para discernir lo que es real de lo que es irreal! Sin embargo, siempre termino por darme cuenta de que divago y que permisiblemente me gusta engañarme atentando en contra de mis propios pensamientos. Y desde esa vez, llego a sentirme desorientada, sin encontrar un rumbo exacto, ni a donde ir, pero es por instantes, porque no estoy preparada para el cambio, por no querer ver la realidad, sentir la sensación de irrealidad permanente.
Dentro de mis más extraños momentos, a veces pienso que me adelanto a las cosas. Que no les doy suficiente tiempo para que se desarrollen. Pero, hay veces que se complican naturalmente, que no intervengo para complicarlas. Repitiendo situaciones ya vividas sabiendo que atentan contra mi deseo. Por alguna razón, no puedo evitarlo y sigo adelante dispuesta a minar el camino con obstáculos, no sé porque lo hago, será porque tengo miedo a cumplir algún que otro deseo. Pero no tengo miedo, hago lo que puedo, puedo un poco más. No tengo (hay) acuerdos para toda la vida.
A veces me gusta pensar sin usar la cabeza, pero es difícil. Las ganas de observar sin molestar a nadie, de escuchar sin interrumpir.
Hay personas que quiero recordar y personas que no quisiera que estén en mi mente por el solo hecho de querer reír antes de llorar. Personas que busco, que no encontraré más. Personas que esperar, que cambien no por mí, sino por ellos mismos.
Creatividad, inspiración.
Sueños, ilusiones, fantasías, locuras, deseos, búsquedas, recuerdos, dolores, sufrimientos, tristezas, penas, lágrimas, esperanzas, alegrías, risas, felicidad, sonidos, ruidos, voces, gritos, canciones, amores, desamores, promesas, obsesiones, celos, confusiones, desconfianza, distancia, fisuras, besos, abrazos, consuelo, ausencia, lejanía, inocencia, descubrimiento, vacíos, todo, nada, secretos, decisiones, cambios, promesas, confianza, seguridad.
Exclamaciones, interrogaciones, objetivos. Efectos, causas, consecuencias, y un sin fin de cosas que son las que hacen que mis mundos se revolucionen.
Sol (L)
ResponderEliminarVos sabes que pienso de este texto, no le falta nada, es realmente perfecto, habla de lo que vivimos día a día (en mi vida), pero por sobre todo, en tratar de equilibrar...
Después cuándo te vea conectada, te voy a dar algunos truquitos para el blog ;)
Te quiero demasiado amiga mia :) Nunca lo olvides:)